SINGAPUR y CANADÁ han firmado un pacto que permitirá realizar vuelos de manera ilimitada entre los dos países, pero se queda corto en relación a lo que Singapore Airlines esperaba.
La buena noticia sobre el acuerdo, que ha sido sellado en Ottawa después de 3 días de conversaciones que acabaron el pasado 1 de noviembre es que SIA ya no tendrá que renovar su permiso de vuelo con las autoridades canadienses dos veces al año.
Pero el acuerdo, el cual para SIA es un paso adelante en la buena dirección, no cambiará nada sobre el terreno ya que los vuelos al partir desde Seul aún se mantienen fuertemente regulados.
Según un portavoz de Singapore Airlines, el acuerdo permite los vuelos ilimitados en rutas ultra largas, pero impone grandes restricciones para los vuelos intermedios y las necesarias quintas libertades, en efecto limitando la escala actual y la frecuencia de las operaciones a Seul y Vancouver.
Para SIA, el hecho de volar entre Seul y Vancouver tantas veces como se quiera, necesita de acuerdos entre estos dos gobiernos, ya que volar non-stop a Canadá que es otra de las opciones, no se contempla actualmente ya que no sería economicamente víable ya que según los observadores de la industria no existe suficiente tráfico directo entre los dos puntos.
Aunque el acuerdo entre el gobierno de Singapur y el de Canadá es permitir más conexiones directas, en la práctica no se conseguirá, debido a que al tener que hacer escala en Corea del Sur, se necesitaría el acuerdo entre este país y Canadá.
