BARCELÓ

24 julio 2009

"CÁLLATE LA BOCA" ABRE TIENDA EN SINGAPUR

Lo que comenzó casi como un juego, a base de camisetas simpáticas con un nombre provocador, se ha convertido en una marca pujante que empieza su internacionalización.  

En el corazón de Singapur se ha inaugurado el Ion Orchard Center, un centro comercial que sería el sueño de cualquier enamorado de las marcas. Y allí, entre Dolce y Gabbana, Hermés o Armani se levanta desde el 21 de julio “Cállate la boca”, compartiendo centro comercial con Zara, su enseña rival, aunque quizá la moda de “Cállate la boca” es más traviesa.  

Óscar Casla, el responsable de la firma comenta que la aventura comenzó “cuando recibieron un correo de un empresario alemán que se proponía abrir la franquicia en el país asiático. No se le dio mucha importancia ya que son muchos los correos que reciben con propuestas diversas y divertidas, pero un día, este empresario se presentó en nuestras oficinas de San Sebastián y nos dimos cuenta de que aquello iba en serio”

Varios meses después la tienda es una realidad, como franquicia, promovida por el emprendedor alemán con la asesoría de la firma donostiarra. Óscar Casla ha vivido en Singapur días frenéticos ayudando en la puesta en marcha del negocio. Ha alucinado con la sociología y la arquitectura de Singapur (no en vano él mismo es arquitecto) y ha impulsado su orgullo europeo al ver cómo se valora en aquellos mercados el sello «made in Europe». 

Casla ha contado la historia miles de veces, pero no le importa repetirla: estos días, en Singapur, la ha tenido que rememorar. Él dibujaba, su amigo Juan Ortiz de Zárate le animó a crear camisetas con sus dibujos, realizaron unas para el equipo de fútbol de la Real Sociedad con mucho éxito... «Y todo se desencadenó. Cogimos un local en el Kursaal y pusimos el nombre de Cállate la boca porque buscábamos una frase de impacto que contrastara con el punto naif de los dibujos». 

Hoy esa marca es una franquicia con tiendas en Málaga, Alicante, Zaragoza, Granada, Madrid, Gijón o Pamplona, y además se vende en más de cien comercios de toda España. Ya no son sólo camisetas: también tazas, manteles, láminas y, desde hace poco, cacerolas o sartenes de la mano de la firma San Ignacio. 

La aventura de Singapur puede ser el primer paso de una expansión por Asia, pero Casla se declara partidario de ir «poco a poco». Aunque no oculta su orgullo al ver a los singapurenses vestidos con las camisetas que nacieron como un juego.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estoy en Singapur y paso por la tienda sin parar, ha tenido mucho exito y siempre hay gente comprando. Enhorabuena!!! A ver si mas firmas españolas se animan a venir al paraiso de las compras.