Según Lee, de 85 años de edad, ministro mentor y padre del actual Primer Ministro, Lee Hsieng Loong, la ciudad-estado no se reproduce con la rapidez que demandan las necesidades de desarrollo y en años pasados el gobierno tuvo que abrir las puertas a la inmigración con talento para paliar una seria escasez de población.
Estas palabras las pronunció Lee durante una conferencia ante universitarios, algo que hace batante a menudo y añadió que sin nuevos ciudadanos el país está llamado a desaparecer.
Los últimos datos oficiales señalaron que en 2008 nacieron 36935 criaturas, cifra que dista bastante de los 60 mil anualmente necesarios para preservar la estabilidad de la población.
En ese contexto el panorama económico resulta menos alentador, pues se espera que la economía caiga hasta un cinco por ciento en el peor de los escenarios de la actual crisis global.
La necesidad de abrirse a los inmigrantes deviene una seria contradicción con la realidad económica. Casi 100 mil puestos de trabajo pueden volar bajo el embate de la recesión mundial, según el Banco de Desarrollo (BDS).
De acuerdo con el BDS el desempleo puede llegar en 2010 al cinco por ciento, el más alto en 20 años, después de una contracción económica estimada en 4,8 por ciento durante los 12 meses en curso.